La Oficina de Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha instado este martes a llevar a cabo una investigación independiente y efectiva sobre las muertes ocurridas en dos hospitales de Gaza, ahora destruidos, que fueron asediados por el ejército israelí y donde se encontraron fosas comunes.
El alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Volker Türk, expresó su horror por la devastación de los complejos hospitalarios Al Naser (sur de Gaza) y Al Shifa (norte), subrayando que «los hospitales tienen derecho a una protección muy especial en virtud del derecho internacional humanitario».
Según informes transmitidos a la Oficina de Derechos Humanos, en el hospital Al Naser se recuperaron 283 cuerpos, de los cuales 42 han sido identificados. Las víctimas habrían sido enterradas en un área cubierta por desechos.
La portavoz de la ONU para los derechos humanos, Ravina Shamdasani, informó que entre los muertos se encuentran ancianos, mujeres y niños, algunos de los cuales fueron encontrados con las manos atadas.
En el hospital Al Shifa, se encontraron 30 cadáveres de palestinos enterrados en dos fosas cavadas en patios adyacentes a los edificios de urgencias y diálisis.
Las fuerzas de defensa israelíes informaron haber matado a 200 palestinos durante su operación en el hospital Al Shifa, pero hay informaciones que sugieren que esta cifra podría estar subestimada, según la portavoz.